lunes, 16 de noviembre de 2009

Una victoria de local que vale oro


En uno de los dos adelantos de la 14º fecha en la zona sur del Argentino A de Fútbol, Guillermo Brown recibió su octava derrota del certamen, esta vez en Lincoln, donde cayó con Rivadavia por un claro 2-0 que podría haber sido aún más amplio.

El elenco del sureño no contó con Armando Monteverde, que instantes antes del partido, tuvo un problema estomacal que lo obligó a quedarse al margen. En su lugar entró Miranda, pero el flojo desempeño del juvenil, hizo que Priseajniuc lo reemplazara en el primer tiempo, para poner a Mauro Fernández.

Por su parte el dueño de casa venia una seguidilla de empates como local y en una zona muy apretada tanto para puestos de clasificacion debia ganar y no tenia mucho margen para el error. La apuesta por jugadores del club que hacen sus primeras armas y lo vienen haciendo muy bien.

A los 3 minutos del partido, Rivadavia se había puesto en ventaja. Un centro preciso de Dante Zúñiga encontró a Agustín Esterluz, que venció a Pereyra para el 1-0.
Más tarde Manzoco tuvo el segundo pero su disparo se estrelló en el travesaño. A los 35, Lucas López recibió su segunda amarilla y se fue expulsado. Ahi Rivadavia hizo pesar mas ese hombre de mas y abrio bien la cancha y genero un mejor futbol que supero a su rival.

Asi, la produccion de G. Brown fue muy ineficaz y en una jugada aislada tuvo una clara oportunidad para el empate, pero Badaracco desaprovechó su mano a mano con Beltramella.

En la segunda parte, Patricio Rubio selló el 2-0 con un golazo desde larga distancia y desato el delirio de todo el banco suplentes y de los hinchas de Rivadavia que venian conten los gritos atragantados como local y el domingo puedo festejar una victoria merecida en todo sentido.

Fuente Consultada: http://www.diariojornada.com.ar

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